lunes, 31 de enero de 2011

Un hermoso collar


Un vago entra a una tienda oxxo y roba unas cervezas. Golpea al encargado y le saca los ojos, se hace un collar con ellos y una agujeta de sus tenis. Sale de la tienda dejando un intenso olor a mierda y suciedad. Se acomoda su chaqueta de piel negra y sube su auto, un shelby. Lo arranca, destapa una cerveza que comienza a beber y escapa del lugar del crimen. Nadie sabe a donde se dirige. Una patrulla se atraviesa en su camino y él acelera. El impacto lateral destroza por completo la patrulla, el shelby solo sufrió daños pequeños. El vago queda aletargado unos instantes, cuando reacciona saca un cigarrillo de su pantalón y fuma. Vuelve a acelerar y circula a toda velocidad por la ciudad, su cabellera, larga hasta los hombros, ondea con el viento que entra por la ventana abierta.

La cerveza ya casi se acaba, mejor la “mata” y destapa otra. Se estaciona enfrente de una casa grande y lujosa. Baja del shelby, abre la cajuela y saca una escopeta. En la puerta de la casa hay un guardia de seguridad que, como toda clase de policía, es estúpido y no se ha percatado de la situación. ¡bang! Los sesos del policía vuelan por el aire. El vago le saca los ojos y los añade a su collar. Tira la puerta de una patada. Al entrar se encuentra con el objetivo recostado en un sillón. El individuo, por el miedo, se orina en los pantalones. Sin compasión, el vago le da un cachazo en la cabeza, lo empieza a golpear y pronto le ha deformado su rostro. Le saca los ojos y los añade a su collar.


-          Idiota, te advertí que no seria fácil olvidarse de mí. Te dije que no te enamoraras de mi, porque en cuanto encontrara a alguien que me cogiera mejor que tu, te tendría que dejar. Pero yo también te… yo también…
¡bang! La dama se suicido disparando a su cabeza, lastima que ya no hay nadie que le pueda sacar sus ojos.
¡bang!... nuestra vida la controla un bang.

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